Lectura

Había una vez un viejo molinero que vivía en un molino de viento en lo alto de una colina. A pesar de su avanzada edad, todos los días subía los empinados escalones que llevaban a la parte superior del molino para verificar que todo estuviera en orden. Un día soleado de verano, mientras barría el piso de madera, notó algo extraño sobresaliendo entre las rendijas de las vigas. Con mucho esfuerzo, logró sacar un viejo libro forrado en cuero. En la portada, grabado con letras doradas, decía "El Libro de los Deseos".

Intrigado, el molinero comenzó a hojear las páginas amarillentas. Cada una contenía instrucciones detalladas sobre cómo realizar un hechizo para cumplir todo tipo de deseos. El anciano no podía creer su suerte. Decidió intentar con un deseo sencillo primero: tener una nueva escoba para barrer. Siguió las instrucciones al pie de la letra y, para su asombro, una flamante escoba apareció ante él como por arte de magia. A partir de ese día, el viejo molinero usó el libro para mejorar su vida poco a poco, pidiendo cosas prácticas como alimentos, ropa nueva y herramientas. Sin embargo, fue muy cuidadoso de no abusar de su poder, pues temía las consecuencias de pedir deseos egoístas. Simplemente se concentró en disfrutar de las pequeñas alegrías que le brindaba el misterioso libro.

Actividades:

1. ¿Dónde encontró el molinero el extraño libro?

2. ¿Qué hizo el molinero cuando descubrió que podía pedir deseos?

3. ¿Por qué crees que el molinero fue cauteloso al pedir sus deseos?

4. Si tuvieras ese libro de deseos, ¿qué desearías primero? Explica tu respuesta.

5. Describe con tus palabras cómo crees que se sintió el molinero al darse cuenta que sus deseos se hacían realidad.